La prórroga del estado de alarma anticipada por el presidente del Gobierno no despeja, sino que agrava las dudas jurídicas y constitucionales sobre la idoneidad de este instrumento para hacer todo lo que el Gobierno está haciendo. No se discute ahora el acierto de las medidas, sino la habilitación constitucional para tomarlas
Es curioso que, en estas circunstancias, el vicepresidente 2º del Gobierno, Pablo Iglesias, se dedique a tuitear el artículo 128 de la Constitución que subordina al interés general toda la riqueza nacional cualquiera que sea su titularidad y reconoce la iniciativa pública en la actividad económica, la posibilidad de que el sector público se reserve por ley recursos o servicios esenciales, así como la intervención de empresas por razones también de interés general.
Recordamos la Peste Negra porque generó casi treinta millones de bajas. La propagación de la epidemia en el continente coincidió con un prolongado período de guerra generalizada entre los más poderosos reinos de la región. Las consecuencias demográficas de la combinación de guerra y epidemia favorecieron una profunda crisis del feudalismo y el fortalecimiento de las ciudades y de las libertades urbanas. También desataron una oleada de antijudaísmo más extensa y violenta que las que se habían producido anteriormente. En el terreno artístico y literario la Peste Negra introdujo en el arte occidental la figura del cadáver y el motivo del encuentro de los caballeros (y las damas) con la muerte.
China gestionó catastróficamente la crisis del coronavirus. Su empeño en ayudar a los países europeos es un intento de blanquear sus errores previos y hacernos olvidar su gran parte de responsabilidad de convertir una epidemia local en pandemia global.El éxito de la propaganda china y el resultado de su búsqueda del liderazgo mundial depende de la respuesta de EEUU y la fortaleza de la relación transatlántica. Todavía estamos a tiempo de gestionar y coordinar una respuesta global.
Esencialmente importa salvar vidas, pero después vendrá el gravísimo impacto del coronavirus sobre la economía y, a no tardar, otras consecuencias de orden político, cultural y social que todavía somos incapaces de anticipar con precisión. El coronavirus se fortalece como un agente de transformaciones radicales en el mundo. Si nos fijamos en España, es evidente que poco quedará de esa agenda compartida por el PSOE con la izquierda radical populista de Podemos. Tendremos que pensar con mucha más prudencia a qué dedicamos el dinero público, qué causas abrazamos, en qué debates nos adentramos y en qué políticos podemos confiar.
El valor de la constitución (ROBERTO BLANCO VALDES)GUILLERMO GRAÍÑO FERRERRazón, sentimiento y utopía (CARMEN IGLESIAS)MOISÉS RUBIAS BARRERAAgua privada para todos (FREDRIK SEGERFELDT)JUAN CREMADES BASTARRECHEThe white man´s burden. Why the west´s effort to aid the rest have done so much i will and so little good (WILLIAM EASTERLY)JORGE MARTÍN FRÍASDenuncia contra Socrates (VITALI SHENTALINSKI)JOSÉ MANUEL DE TORRES¡Última hora: guerra en España! (EDWARD KNOBLAUGH)
Hace doce años que Gregorio Ordóñez fue asesinado. Y doce años después seguimos comprobando hasta qué punto su legado político, la herencia cívica que dejó a la sociedad vasca, sigue vigente, nos compromete y nos inspira.Goyo no fue un héroe involuntario, lanzado por las circunstancias a un destino con el que no contara. Gregorio Ordóñez fue un hombre que asumió de manera íntegra y consciente un compromiso sin límites, hasta su propia muerte, con el bien de la libertad.Se rebeló contra el terror y contra el miedo no sólo por un sentido de justicia que no admitía transacción. Se rebeló por dignidad.Su “¡basta ya!” ?que después fue coreado por tantas voces en las calles de esta ciudad? expresó la decisión firme de no tolerar la humillación ni el sometimiento a los agentes del terror, a sus cómplices y a sus beneficiarios, a quienes lo instigan y lo legitiman.
La obra de Alexis de Tocqueville (1805-1859) es lectura indispensable para el lector contemporáneo. Nadie mejor que él ha sabido explicar cómo bajo las apariencias de la democracia puede ocultarse un tipo nuevo de despotismo blando, pacífico, muelle, aparentemente racional, en el que los apáticos habitantes salen de su sopor consumista un instante cada cierto número de años para elegir a sus tiranos. No existe mejor alegato a favor de una democracia de ciudadanos iguales, libres y responsables, conscientes de los peligros de un poder político cada vez más inquisitorial, protector y previsor que La democracia en América. En sus páginas se describe el ideal de una democracia que conjuga la igualdad y solidaridad con la necesidad del debate, la discusión, el desorden que provoca la búsqueda permanente de la libertad. Para Tocqueville, lo más trágico es la tendencia a que los seres humanos, cada vez más individualistas, inmersos en sus quehaceres diarios, renuncien ellos mismos a defender sus libertades. Alexis de Tocqueville nos ha enseñado que la libertad no puede obtenerse más que a través de la acción diaria de los ciudadanos en la vida política y social, de la constante vigilancia y control de la acción de un Estado que se pretende eterno vigilante y protector, omnisciente y paternal y que considera a sus súbditos en una eterna infancia.
Buena parte del gran público no especialista sólo conoce a Milton Friedman como el “reaccionario economista de Chicago que defendía posturas de extrema derecha”. Al igual que tantas otras opiniones generales, esta apreciación es falsa. Salvo que se considere reaccionaria la defensa enérgica del orden económico de libre mercado. Friedman fue un defensor muy eficaz de la libertad. De la económica y de las demás. No ofreció sus teorías para apuntalar dictadura alguna como hizo John Maynard Keynes en el prólogo a la segunda edición alemana de la Teoría general. No viajó a Chile para suministrar consejo ni apoyo a la dictadura chilena. Fue a impartir unas conferencias invitado por una institución privada. También viajó a España, durante la dictadura de Franco, para participar en un seminario de economía, en 1970, en Cataluña. Allí se vio a un futuro ministro de Felipe González departiendo animoso en los debates; también se pudo ver a algún que otro miembro del PSUC, sin que nadie le preguntara a Milton: ¿qué hace un liberal como usted en una dictadura como ésta?
Intervención de Gabriel Albiac en la presentación de La libertad traicionada
Intervención de José María Marco en la presentación de La libertad traicionada
El futuro de la Libertad: desde la revolución a las instituciones (1/2)
El futuro de la Libertad: desde la revolución a las instituciones (2/2)
El sindicato polaco: solidaridad y la aventura europea de la libertad (1/2)
06.04.2020. La prórroga del estado de alarma anticipada por el presidente del Gobierno no despeja, sino que agrava las dudas jurídicas y constitucionales sobre la idoneidad de este instrumento para hacer todo lo que el Gobierno está haciendo. No se discute ahora el acierto de las medidas, sino la habilitación constitucional para tomarlas
01.04.2020. Es curioso que, en estas circunstancias, el vicepresidente 2º del Gobierno, Pablo Iglesias, se dedique a tuitear el artículo 128 de la Constitución que subordina al interés general toda la riqueza nacional cualquiera que sea su titularidad y reconoce la iniciativa pública en la actividad económica, la posibilidad de que el sector público se reserve por ley recursos o servicios esenciales, así como la intervención de empresas por razones también de interés general.
31.03.2020. Recordamos la Peste Negra porque generó casi treinta millones de bajas. La propagación de la epidemia en el continente coincidió con un prolongado período de guerra generalizada entre los más poderosos reinos de la región. Las consecuencias demográficas de la combinación de guerra y epidemia favorecieron una profunda crisis del feudalismo y el fortalecimiento de las ciudades y de las libertades urbanas. También desataron una oleada de antijudaísmo más extensa y violenta que las que se habían producido anteriormente. En el terreno artístico y literario la Peste Negra introdujo en el arte occidental la figura del cadáver y el motivo del encuentro de los caballeros (y las damas) con la muerte.
31.03.2020. China gestionó catastróficamente la crisis del coronavirus. Su empeño en ayudar a los países europeos es un intento de blanquear sus errores previos y hacernos olvidar su gran parte de responsabilidad de convertir una epidemia local en pandemia global.El éxito de la propaganda china y el resultado de su búsqueda del liderazgo mundial depende de la respuesta de EEUU y la fortaleza de la relación transatlántica. Todavía estamos a tiempo de gestionar y coordinar una respuesta global.
30.03.2020. Esencialmente importa salvar vidas, pero después vendrá el gravísimo impacto del coronavirus sobre la economía y, a no tardar, otras consecuencias de orden político, cultural y social que todavía somos incapaces de anticipar con precisión. El coronavirus se fortalece como un agente de transformaciones radicales en el mundo. Si nos fijamos en España, es evidente que poco quedará de esa agenda compartida por el PSOE con la izquierda radical populista de Podemos. Tendremos que pensar con mucha más prudencia a qué dedicamos el dinero público, qué causas abrazamos, en qué debates nos adentramos y en qué políticos podemos confiar.

01.04.2007. El valor de la constitución (ROBERTO BLANCO VALDES)GUILLERMO GRAÍÑO FERRERRazón, sentimiento y utopía (CARMEN IGLESIAS)MOISÉS RUBIAS BARRERAAgua privada para todos (FREDRIK SEGERFELDT)JUAN CREMADES BASTARRECHEThe white man´s burden. Why the west´s effort to aid the rest have done so much i will and so little good (WILLIAM EASTERLY)JORGE MARTÍN FRÍASDenuncia contra Socrates (VITALI SHENTALINSKI)JOSÉ MANUEL DE TORRES¡Última hora: guerra en España! (EDWARD KNOBLAUGH)

29.01.2007. Hace doce años que Gregorio Ordóñez fue asesinado. Y doce años después seguimos comprobando hasta qué punto su legado político, la herencia cívica que dejó a la sociedad vasca, sigue vigente, nos compromete y nos inspira.Goyo no fue un héroe involuntario, lanzado por las circunstancias a un destino con el que no contara. Gregorio Ordóñez fue un hombre que asumió de manera íntegra y consciente un compromiso sin límites, hasta su propia muerte, con el bien de la libertad.Se rebeló contra el terror y contra el miedo no sólo por un sentido de justicia que no admitía transacción. Se rebeló por dignidad.Su “¡basta ya!” ?que después fue coreado por tantas voces en las calles de esta ciudad? expresó la decisión firme de no tolerar la humillación ni el sometimiento a los...

01.01.2007. La obra de Alexis de Tocqueville (1805-1859) es lectura indispensable para el lector contemporáneo. Nadie mejor que él ha sabido explicar cómo bajo las apariencias de la democracia puede ocultarse un tipo nuevo de despotismo blando, pacífico, muelle, aparentemente racional, en el que los apáticos habitantes salen de su sopor consumista un instante cada cierto número de años para elegir a sus tiranos. No existe mejor alegato a favor de una democracia de ciudadanos iguales, libres y responsables, conscientes de los peligros de un poder político cada vez más inquisitorial, protector y previsor que La democracia en América. En sus páginas se describe el ideal de una democracia que conjuga la igualdad y solidaridad con la necesidad del debate, la discusión, el desorden que prov...

15.12.2006. Buena parte del gran público no especialista sólo conoce a Milton Friedman como el “reaccionario economista de Chicago que defendía posturas de extrema derecha”. Al igual que tantas otras opiniones generales, esta apreciación es falsa. Salvo que se considere reaccionaria la defensa enérgica del orden económico de libre mercado. Friedman fue un defensor muy eficaz de la libertad. De la económica y de las demás. No ofreció sus teorías para apuntalar dictadura alguna como hizo John Maynard Keynes en el prólogo a la segunda edición alemana de la Teoría general. No viajó a Chile para suministrar consejo ni apoyo a la dictadura chilena. Fue a impartir unas conferencias invitado por una institución privada. También viajó a España, durante la dictadura de Franco, par...